Meghan Markle está enviando un poderoso mensaje a la familia real, demostrando que renunciar como miembro de alto rango de la realeza no ha disminuido su influencia.
La duquesa de Sussex lucía radiante y confiada cuando llegó a un teatro fuertemente custodiado en Columbia con el apoyo del Príncipe Harry en el último día de su gira, informó el Mirror.
Meghan lució glamorosa con una camisa blanca sin mangas y una falda enjoyada mientras saludaba a los asistentes en el Teatro Municipal de Cali durante el Foro Mujeres Afro y Poder, mientras un Harry orgulloso miraba.
Se ha reforzado la seguridad alrededor del teatro, con soldados armados, agentes de explosivos y policías, incluido un perro, desplegados para garantizar la seguridad.
Posteriormente, Harry y Meghan tienen previsto asistir al Festival Petronio Álvarez, una celebración de la música afrocolombiana, como evento final de su visita de cuatro días al país sudamericano.
Anteriormente, los Sussex visitaron Cartagena, donde colaboraron con una escuela de tambores local que conserva los tambores tradicionales africanos.
Meghan y Harry recibieron un bote de madera hecho a mano por parte de un estudiante como homenaje a la ciudad costera y participaron en una lección de batería y una actuación local, que recibió un entusiasta aplauso tanto del vicepresidente como de Meghan.
En Colombia, su seguridad incluye un oficial con un escudo de Kevlar, diseñado para proteger contra posibles amenazas. También conocido como maletín balístico, el escudo se utiliza para proteger al vicepresidente del país, quien ha enfrentado múltiples intentos de asesinato.
Mientras tanto, Harry perdió un recurso ante el Tribunal Superior contra el Ministerio del Interior en febrero por cambios en su seguridad personal mientras se encontraba en el Reino Unido, pero se le concedió autorización para apelar.
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